LA CULTURA CIMIENTA LA SOCIEDAD.
El mundo ha sufrido cambios en los últimos
años. Los avances de la ciencia y de la técnica han modificado el lugar del
hombre en el mundo y sus relaciones sociales. La educación y la cultura, son
esenciales para un verdadero desarrollo del individuo y la sociedad. Por ello,
MANIFIESTO:
.- La cultura es esencial para el
desarrollo del individuo y de la sociedad.
.- Usemos la cultura para eliminar la
marginación. La cultura proporciona al hombre la capacidad de reflexionar, le
hace critico y racional y por lo tanto libre. Cualquier forma de manipular la
cultura de una sociedad conlleva la dominación de esta.
.- Los estados
deben garantizar a todos el acceso gratuito a la cultura, a través de los
medios adecuados para cada sector de la población.
.- La evolución de la sociedad
depende de su cultura y, buena parte de esta depende de los medios de
comunicación, que deben, mostrar la realidad de forma objetiva, veraz y
razonada. No debemos consentir que se seleccionen los hechos y se manipulen
para presentar una conclusión ventajosa.
.-
Separemos al mercado de los medios de comunicación, pues ha provocado la falta de rigurosidad, la
manipulación de la información y la aparición de programas basura en la
televisiones, en aras de un mayor índice de audiencia que atraiga a los
inversores.
.-Los
ciudadanos tienen derecho a una cultura veraz y a una crítica racional que
debería ser la base de los contenidos informativos de los medios de
comunicación Debemos exigir la divulgación del
conocimiento y la cultura. La ausencia de esta difusión, no solo sólo no
incrementa la cultura media de la gente sino que la disminuye. Desvelemos los
“Punset”, enterremos a las “Esteban”.
.-
Solo podremos ser verdaderamente libres cuando poseamos una información veraz
sustentada en una base cultural sólida, que nos posibilite hacer una critica
racional de cuanto ocurre en la sociedad. “El conocimiento os hará libres”.
.-
Ese enriquecimiento cultural no debe olvidar la arquitectura, por ello debemos
socializarla, introducirla en el saber cotidiano de la gente.
.- Adoptemos el
compromiso de difundir por todos los cauces posibles, como charlas,
exposiciones, publicaciones o programas que ayuden a la mejor comprensión de la
labor del arquitecto. Para ello es necesario introducir conceptos asequibles
para la mayoría de la población. Que repongan “Elogio de la luz” y “La música
callada”.
.-
También tenemos la obligación de hacer ver que si los modos de vida, las
necesidades y programas de las viviendas y edificios públicos de la era clásica
han cambiado, que todo es ahora radicalmente distinto, por qué tenemos que
seguir utilizando los mismos cánones estéticos que entonces.
.- Hagamos un estudio pausado del proyecto. Conseguir una buena calidad
en la arquitectura, socializar esa arquitectura es labor de todos. De esta
forma se puede y se debe mejorar la arquitectura, la ciudad y la cultura
social.